Un nuevo recurso de los seis agentes de Mossos d'Esquadra imputados por una agresión racista en enero 2019 frena la rueda de reconocimiento, a la que tenían que someterse este jueves a cara descubierta, después de que el juez que investiga el caso el rechazase la petición de los policías para comparecer ante el denunciante con el rostro tapado.
La defensa de los policías, imputados por delitos de lesiones y contra la integridad moral, ha recurrido la decisión del Juzgado de Instrucción 3 de Manresa esta misma mañana, y queda así en suspenso el reconocimiento hasta que la Audiencia de Barcelona resuelva las alegaciones.
Mossos acusados de racismo
Este no es el primer recurso de los acusados, que primero solicitaron el archivo el caso, y el pasado diciembre ya reclamaron cubrir su rostro ante la víctima. Una petición que el magistrado de Manresa rechazó este mismo miércoles ya que "dificultaría la posible identificación por parte del denunciante", que aseguró haber visto sus caras durante la actuación bajo sospecha.
SOS Racisme presentó la denuncia por la actuación policial en enero de 2019, cuando los agentes habrían proferido gritos racistas contra Wubi, de 20 años. La entidad publicó unos audios en los se escucha como varios individuos tildan al joven de "mono" o "negro de mierda". El denunciante asegura que fueron seis mossos d'esquadra.
Traslado de los policías
Tras salir a la luz la grabación, el Departamento de Interior trasladó de destino a los agentes, aunque no han sido suspendidos de empleo y sueldo.