Se puede acabar el mundo, pero en España moriremos mejor que el resto, porque aquí lo haremos riendo y moriremos solamente una miaja, nada más. Nos estamos tomando la pandemia a la tremenda y esto de la optimización de los recursos como si fuésemos alemanes y claro, ser consejero de Sanidad se está poniendo peor que ser narcotraficante. Estar en la picota mediática todo el día le acaba moliendo a uno y ya no se sabe si de la pandemia se están encargando políticos cualificados o Sergio Ramos.
Eso es lo que pasó ayer con el consejero de Sanidad de Andalucía, que justificó la falta de jeringuillas adecuadas para los viales de «Pfizer» diciendo que se perdía tan sólo «un