César González Díaz nació en Grimaldo donde continúan viviendo sus padres. Es arquitecto técnico y se dedicó a este oficio un tiempo pero estalló la crisis inmobiliaria; aguantó hasta el 2011. En noviembre de este año compró en su pueblo un antiguo parador de aquellos de toda la vida que había al pie de las carreteras y lo convirtió en casa rural.
«No me quedaba otra que reinvertarme. Tenía un niño de 3 añitos y otro recién nacido. Con los dos años que disfruté del paro, yo mismo me puse a rehabilitar el inmueble adquirido, porque estaba completamente en ruinas. Finalmente, en 2013 abrimos La Posada de Grimaldo», explica César mientras enseña los detalles de este bello y original establecimiento turístico.
Original porque todas las habitaciones llevan nombres de genios españoles del mundo del arte. Federico García Lorca, Pablo Picasso, Antonio Gaudí, María Zambrano... Es un lugar lleno de magia el de esta pedanía de Cañaveral. «A día de hoy continuamos reformándla porque esto es inmensamente grande», cuenta mientras enseña el patio con la higuera, una pequeña barbacoa y una fuente con peces de colores.
La casa se divide en dos plantas. En la de arriba «tenemos a María Zambrano y a Miguel de Cervantes».
Ahora disponemos de cinco habitaciones, pero existe la posibilidad de muchas más. En las estancias siempre hay algún guiño a cada autor: Lorca está pintada de rojo y blanco; la de Picasso, con tonos azules, posee un cuadro de Guernica y la paloma de la paz. La de Gaudí es la más antigua de la casa, tiene formas circulares y una viga de madera muy grande.
La parte de atrás del edificio eran las antiguas caballerizas, que se han mantenido intactas para que no se cayeran. En el alojamiento se incluye el desayuno y no faltan los productos de la tierra: dulces artesanos, miel, zumo, pan, leche, galletas... «Todos los dulces caseros los hace mi suegro, que ha sido el pastelero de la pastelería Isa en la plaza Mayor de Cáceres», dice con orgullo mientras los da a probar. Y es que Lorca, Cervantes o Picasso ya tienen casa en Grimaldo.
