El Estado se hubiera quedado con un voto de calidad que le daba amplios poderes, según fuentes regionales.
La sesión inaugural de la Conferencia Sectorial del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, en la que el Ministerio de Hacienda y las comunidades autónomas decidirán el reparto de las ayudas europeas, ha empezado con bronca. La ministra María Jesús Montero se ha visto obligada a retirar el reglamento con el que estaba previsto que funcionara este órgano, que privilegiaba la capacidad de decisión en el Estado.
El funcionamiento era similar al del Consejo de Política Fiscal y Financiera, pero con un voto de calidad que privilegiaba todavía más las posiciones del Estado. Esto ha provocado una airada reacción por parte de las regiones, tanto las del Partido Popular como las del PSOE y de los partidos nacionalistas.
Por ello, Montero ha decidido "darle una vuelta" al citado reglamento, según cuentan a Invertia fuentes de las regiones. Sin embargo, las protestas no se han quedado solo en el reglamento.
En la cita, que todavía no ha terminado a cierre de esta información, muchas compañías han protestado por cómo se han repartido los fondos. Este es el caso de Castilla y León, que ha mostrado su disconformidad con su pedazo de la tarta justo antes de que empezara la reunión.