Transmite ideas y extrae conclusiones basadas en la interpretación de hechos y datos por parte del autor.
Fichar a un futbolista es un trabajo, fichar a Maradona es una aventura. Dos aventuras, en mi caso. Como vicepresidente del Barça viajé por primera vez a Buenos Aires para intentarlo a finales de los 70. Aún jugaba en Argentinos Juniors y era apenas un niño. Sus padres me invitaron a cenar a su casa para negociar, era una casita muy humilde en Villa Fiorito con una pequeña cocina en la que su madre nos preparó la comida. Mientras la hacía, Diego me retó a un partidillo en el pasillo. Era muy est
Para seguir leyendo, hazte Premium
¿Ya eres Premium? Inicia sesión
Mensual
y después 7,99 €
Anual
Ahorra 3 meses
Gratis 1 año de Legálitas Estándar (valorado en 240€)
Conforme a los criterios deThe Trust Project